Hoy nos hemos despertado en medio de una densa niebla. De todas formas, la previsión es de niebla matinal en el valle y despejado en las alturas, así que no estamos preocupados.
Cogimos el telesilla del glaciar de Bossons en cuanto abrió, a las ocho y media. Durante el trayecto, que duró unos 15 minutos, atravesamos la niebla y comenzamos a disfrutar de un precioso mar de nubes. Hemos salvado unos 400 m de desnivel.
Comenzamos a subir rápidamente por un bonito sendero que va zigzagueando a través de un denso bosque. La vegetación, por ahora, pocas veces nos deja ver el valle. El camino no tiene pérdida, pero aun así, los pocos cruces que hay, están señalizados.
En algo menos de hora y media de subida llegamos al Chalet des Pyramides. Aprovechamos para parar y echarnos crema porque la vegetación está empezando a clarear. De todas formas, un leve velo nuboso tamiza el sol y hace que no nos dé de lleno. Es una suerte, porque sin calor, la subida es mucho más llevadera.
A partir de aquí la pendiente se empina todavía más y el camino, poco a poco, se va haciendo más pedregoso. También deja de haber postes con flechas y pasamos a seguir puntos amarillos para guiarnos.
El camino va pasando de un lado al otro de la cresta de la Montagne de la Côte, en la que estamos, y vamos alternando la visión hacia el glaciar de Bossons y el de Taconnaz. Hay momentos en los que el paisaje te deja boquiabierto.
A medida que vamos cogiendo altura hay menos tramos de camino y más de roca y en algunos puntos hay que ayudarse un poco de las manos. En estas zonas, los puntos amarillos que vamos siguiendo son fundamentales. La ruta está también bastante transitada, pero por ahora no es agobiante.
Cuando llegamos al Gîte à Balmat nos paramos un poco a leer la placa que hay allí e, inevitablemente, a reflexionar. En este punto, bajo estas rocas, durmieron en 1786 Jaques Balmat y Michel G. Paccard, las dos primeras personas en alcanzar la cumbre del Mont Blanc. Evidentemente, ellos no habían cogido ningún telesilla para ahorrarse unos metros. ¡Cómo serían las expediciones en aquella época! En la placa podemos leer:
«Gîte à Balmat» 2.530 m
El 7 de agosto de 1786, los «chamoniards» Jacques Balmat y Michel G. Paccard vivaquearon en condiciones difíciles bajo este bloque de granito. Al día siguiente, 8 de agosto, a fuerza de voluntad y coraje, alcanzaron por primera vez la cima del Mont Blanc, abriendo el camino del alpinismo moderno.
Llegados a ese punto, sabemos que ya nos falta muy poco. Cada vez vemos más cerca la impresionante mole de hielo que tenemos delante y, cuanto más nos aproximamos al objetivo del día, más insignificantes nos sentimos.
Y llegamos a La Jonction, el punto donde se unen, o más bien se bifurcan, los glaciares de Bossons y Taconnaz, que bajan directamente del Mont Blanc. El lugar es tan descomunal, y estamos tan cerca, que no cabe en lo que puede acaparar nuestra mirada sin mover la cabeza. Buscamos una zona en la que poder estar algo solos y miramos, y miramos, y miramos sin parar. Y fotografiamos, y fotografiamos, y fotografiamos sin parar.
Estando allí arriba empiezo a notar el estómago algo revuelto. Hasta tengo la sensación de que puede ser de la impresión que me está causando estar en ese lugar. Como algo de pan, que es lo único que me apetece y, tras contemplar un rato más semejante espectáculo de hielo, emprendemos la bajada. Cuesta abandonar ese sitio. ¿Volveré a ver alguna vez algo parecido?
Aunque el camino es de ida y vuelta, cambiamos de perspectiva completamente. Ahora iremos disfrutando de las vistas hacia el valle de Chamonix, que ya se ha despejado del todo. Bajamos prácticamente sin parar, ni siquiera en el Chalet des Pyramides. Comemos poco después de pasarlo en una curva con una preciosa vista hacia el glaciar de Bossons.
Tras unas cuantas curvas más llegamos al Chalet du Glacier des Bossons, con una preciosa terraza con vistas al glaciar, y nos tomamos unas buenas cervezas antes de coger el telesilla de vuelta. Ha sido una ruta realmente maravillosa. Quiero más.
Más información sobre esta ruta
Descubrimos esta ruta en la guía Randonner à Chamonix, de la editorial Idea Montagna. Utilizamos el mapa Carte de sentiers de randonnées pédestres ou Pays du Mont-Blanc, que venden en la oficina de turismo de Chamonix y en la Maison de la Montagne.
Unos días antes consultamos sobre esta ruta en la Maison de la Montagne y nos dijeron que era importante hacerla un día sin lluvia y que tampoco hubiese llovido el día anterior. El suelo debe estar bien seco.
Para poder editar el track y poder subir un mapa, utilicé la cartografía proporcionada por los amigos del blog Cartografía Digital. ¡Gracias!
Puedes consultar en este enlace los horarios y precios del telesilla del glaciar de Bossons. De todas formas, como nosotros cogimos varios remontes a lo largo de nuestra estancia en Chamonix-Mont-Blanc, utilizamos el Mont Blanc Multipass.
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- Distance Instructions
Datos técnicos
- Longitud: 11,7 km
- Fecha de realización: 22/08/2019
- Desnivel de subida: 1.390 m
- Desnivel de bajada: 1.390 m
- Punto más alto: 2.585 m
- Punto más bajo: 1.363 m
- Tipo de recorrido: Ida y vuelta
- MIDE / Severidad del medio natural: 3
- MIDE / Orientación en el itinerario: 2
- MIDE / Dificultad en el desplazamiento: 3
- MIDE / Cantidad de esfuerzo necesario: 4
Mapa
Información geográfica perteneciente al Institut National de l'Information Géographique et Forestière ©.
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