Estamos pasando unos días en casa de mi madre y hoy hemos decidido salir a hacer una ruta mañanera para estar de vuelta en casa para comer. Vamos a ir a la parroquia de Chandebrito, perteneciente al concello de Nigrán, y una de las grandes afectadas en los incendios que asolaron Galicia en octubre de 2017. Dos mujeres llegaron a perder aquí la vida intentando escapar del fuego.

Aquel fin de semana estaba por la zona, en el Val Miñor, bañándome en la playa en pleno mes de octubre y con los aviones apagafuegos cargando agua justo delante de nosotros. Ardía Baiona, el Galiñeiro, Chandebrito… Y todo se veía desde la playa. Era una situación surrealista. Jamás olvidaré nuestro paso aquella tarde por el centro de Vigo, con todo lleno de humo y el cielo gris anaranjado. No había nubes, pero no se veía el sol. La ciudad tenía un aspecto apocalíptico, de película. Pero en esta ocasión era real.

Después de aquello tocó renacer. Las comunidades de montes, asociaciones de vecinos, colegios, asociaciones ecologistas y otras entidades se pusieron a trabajar y a reforestar con especies autóctonas. Por desgracia, los eucaliptos siguen existiendo e incluso están naciendo en zonas donde antes del incendio no había, pero es lo que provoca el fuego. La cuestión es que yo había oído hablar de todo lo que se había hecho en esta zona y tenía ganas de verlo.

Aparcamos junto a la iglesia de San Xosé de Chandebrito y nos ponemos en marcha. Atravesamos el núcleo de A Igrexa y por una buena escalinata de madera que pasa junto a unos molinos de cubo subimos hasta el castro de Chandebrito. Acabamos de empezar y ya tenemos que pararnos a disfrutar de las vistas. Además, gozamos de un día estupendo con bastante buena visibilidad.

Descendemos y pasamos junto a las Cinco Cruces, un lugar curioso ya que no es nada habitual encontrar tantas cruces juntas. Se cree que se colocaron aquí para cristianizar el castro y que se puede deber a un culto de origen franciscano. También fue lugar de rituales para curar enfermedades o pedir lluvia en épocas de sequía.

Al lado de las cruces está el Parque da Memoria, lugar que pretende hacer que no se olvide lo que ocurrió aquel día concienciando a la sociedad de la necesidad de cuidar el patrimonio natural. Y pocos metros más allá se encuentra la escultura Rexurdimento, creada con madera calcinada en el incendio por el colectivo “Arte no Queimado” bajo la dirección de Remigio Davila. Es una escultura muy conocida en la zona, o al menos yo había visto decenas de fotos. Venía con miedo de encontrarme algo excesivamente turístico o instagrameable, pero no, a mí me removió algo por dentro. Me gustó conocer este lugar.

En fin, este primer kilómetro nos ha llevado más de media hora. O espabilamos o no llegamos ni a merendar. Empezamos a subir por una pista (toda la zona está repleta de pistas y caminos), la abandonamos para tomar un sendero algo estrecho entre matorrales más altos que nosotros y regresamos a otra pista que nos llevará hasta el monte Cepudo.

Lo primero que nos encontramos es el aparcamiento del restaurante que hay en el monte Cepudo que es ya un buen mirador, pero hay que subir hasta arriba del todo, por detrás del restaurante, para disfrutar de las mejores vistas. Como hay carretera para llegar hasta aquí, nos encontramos con varios ciclistas. Hacia el interior destaca el Galiñeiro, pero hacia donde se nos va la vista es al mar. Vemos las islas Cíes, Vigo y su ría, cabo Home

Uno de los lugares que mejor se ve desde el mirador es la ermita del monte Alba, a donde nos dirigimos a continuación. Tras unas cuantas fotos y disfrutar de las vistas, emprendemos rumbo al este para dirigirnos de nuevo hacia Chandebrito (los montes Alba y Cepudo pertenecen a Vigo). Al principio todavía disfrutamos de buenas vistas, pero tras un tramo de algo más de medio kilómetro por carretera, acabamos adentrándonos en caminos rodeados de eucaliptos. Quizás sea el tramo menos bonito de la ruta de hoy.

Tras otro medio kilómetro por carretera, la abandonamos para adentrarnos en la fraga dos Muíños de Rodas. Aquí se encuentra un conjunto de tres molinos que se estima que son del siglo XIX. Vuelven a ser molinos de cubo, como todos los que hemos visto hoy. Esta pequeña fraga es uno de los pocos espacios naturales de la zona en los que domina el bosque tradicional gallego, con predominancia de los robles, pero donde también hay laureles y madroños. Este pequeño bosque consiguió esquivar el incendio de 2017.

Hace un rato pasamos bastante cerca del punto de comienzo de la ruta y podríamos haber terminado, pero tenemos ganas de más Chandebrito. Los caminos por los que vamos ahora ya están más despejados y podemos disfrutar del paisaje que nos rodea. En bastantes puntos se ven árboles pequeñitos más o menos recién plantados.

Otro punto de interés por el que pasamos fueron los petroglifos Chan do Rapadouro y poco después, el bosque Volando Voy, donde el conocido programa de Jesús Calleja plantó mil árboles gracias a la ayuda de 200 personas voluntarias. Tenía un aspecto algo descuidado. Ojalá llegue a prosperar.

Queremos poner ya rumbo al coche, pero antes todavía pasamos junto al bosque de la Luz, este promovido por la cantante Luz Casal, y nos detenemos en otro mirador, el monumento al grupo musical Milladoiro. Reconozco que este resulta demasiado brillante para mi gusto. No me entusiasma. Lo bueno es que desde allí vemos perfectamente el camino que nos falta hasta el coche.

Al terminar nos detenemos un momento a curiosear la iglesia y sus alrededores y antes de emprender el rumbo a casa paramos en un bar que ya habíamos fichado al comienzo de la ruta para tomarnos nuestra merecida clara de limón post ruta. Salvo el tramo de eucaliptos, la ruta me ha gustado. Las vistas desde los montes Alba y Cepudo valen mucho la pena y Chandebrito tiene un montón de lugares interesantes que ver. ¡Y nos marchamos con la sensación de que nos falta mucho por conocer!

Más información sobre esta ruta

Aunque en algunos tramos del recorrido coincidimos con rutas señalizadas, nosotros no fuimos siguiendo ninguna de estas señales. Esta fue la ruta que escogimos nosotros, pero la zona cuenta con un montón de pistas y caminos, así que las posibilidades son casi infinitas. En Google Maps pueden verse la cantidad de puntos de interés señalizados que hay en Chandebrito. Para mí fue una grata sorpresa.

Recomiendo hacer la ruta con buen tiempo porque uno de sus grandes fuertes son las vistas.

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01/02/2024 23:01
  • Distance Instructions
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Datos técnicos

  • Longitud: 13,2 km
  • Fecha de realización: 20/08/2023
  • Desnivel de subida: 515 m
  • Desnivel de bajada: 515 m
  • Punto más alto: 521 m
  • Punto más bajo: 200 m
  • Tipo de recorrido: Circular
  • MIDE / Severidad del medio natural: 1
  • MIDE / Orientación en el itinerario: 3
  • MIDE / Dificultad en el desplazamiento: 2
  • MIDE / Cantidad de esfuerzo necesario: 3
→ ¿Qué es el MIDE?

Mapa

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