Hacía mucho tiempo que tenía ganas de venir al lado gallego de Pena Trevinca, pero me queda tan a desmano que nunca encontraba el momento. Hasta este fin de semana, que dijimos que ya iba siendo hora.
Llegamos a la aldea de A Ponte, en el municipio ourensano de A Veiga, sobre las once y media de la mañana tras tres horas de coche. Aparcamos justo al lado de los paneles informativos de las rutas que parten desde aquí. La nuestra será el PR-G 200.
Comenzamos atravesando la aldea siguiendo el curso del río Xares. Estos primeros minutos de ruta ya nos parecen preciosos. La aldea es muy bonita, aunque con muchas casas abandonadas, y el río le da un toque especial.
De todas formas, no tardamos en abandonar el curso del río para empezar a subir de verdad. Es una subida continuada que no da ni un minuto de tregua. Al principio, por un sendero entre matorrales. Poco a poco la vegetación irá siendo más y más baja hasta quedarse solo en hierba. Al pasar al lado de un refugio hacemos un tramo de pista, pero enseguida la abandonamos y, aunque hay buena traza de la zona de paso, lo que más ayuda a orientarse son los postes bajos que señalizan la ruta.
Aquí el viento ya es fuerte y muy frío. ¡Menos mal que hemos venido bien abrigados! Y eso que pensé que me había pasado con la ropa ya que el coche marcaba 17°C, pero con la altitud la temperatura baja que da gusto. Hace tanto frío que incluso a pesar de ir subiendo, apenas sudo y me tengo que poner la chaqueta poco antes de llegar al punto más alto del día, O Fial, a 1.841 m de altitud.
Hasta aquí la ruta había sido bonita, pero quizás un poco monótona ya que vamos viendo todo el tiempo lo mismo, cada vez desde un poquito más arriba. Al pasar O Fial, y sobre todo en la bajada a la lagoa da Serpe, las vistas cambian y disfrutamos más de la ruta. La bajada a la laguna se hace por un caminillo estrecho con unas vistas hacia el valle del río Bibei que me dejan maravillada.
El entorno de la lagoa da Serpe es precioso y decidimos que es el sitio perfecto para comer sentados en una roca al sol. Sigue soplando el viento, pero no tanto como en las zonas más expuestas de la ruta. Mientras comemos no dejamos de mirar al cielo y comentar la cantidad de estelas de aviones que vemos. ¡Debemos estar bajo una autopista de aviones!
Ya con la barriga llena, emprendemos la marcha de nuevo. Recorremos ahora una ladera sin ganar ni perder altitud y por senderos estrechos bastante comidos por la vegetación. Casi ni vemos dónde ponemos los pies. A veces nos salimos de la ruta oficial, pero es que hay numerosos senderillos paralelos, probablemente hechos por el paso de animales. En cualquier caso, no nos presentó mayor dificultad.
De nuevo el camino baja de forma pronunciada hasta llegar a la lagoa de Ocelo. Una manada de caballos estaba pastando en su orilla, pero se marchó corriendo en cuanto nos acercamos un poco. Qué pena. Eran muy bonitos.
Poco después volvemos a encontrarlos en un campo junto al camino, pero lo mejor ocurrió a continuación. Cuando nos damos cuenta, ¡nos venían siguiendo! A una distancia prudencial, cierto. Y si nos parábamos, se paraban, pero estaban muy graciosos en fila india detrás de nosotros. Desgraciadamente, en un cambio de rasante dejamos de verlos.
Esta anécdota de los caballos, por suerte, nos amenizó una de las partes más monótonas de la ruta que transcurre por una pista infinita en línea recta. En un punto de esta bajada una señal nos avisaba de que debíamos desviarnos a la derecha para poner rumbo a Ponte de nuevo. Ya no tardamos mucho en llegar.
Una vez en la aldea todavía nos entretuvimos un rato antes de llegar hasta el coche leyendo paneles informativos sobre molinos y sobre el entorno natural de Pena Trevinca. Qué pena que el centro de visitantes estuviese cerrado.
En fin, hemos disfrutado de una jornada montañera estupenda con un día espectacular. ¡A ver si no tardamos demasiado en volver a esta zona de Galicia!
Más información sobre esta ruta
Aunque la ruta es un sendero homologado, el PR-G 200 y, por tanto, es fácil encontrar información en Internet, yo la encontré en los libros Galicia. Rutas con leyenda, de Sua Edizioak, y la guide de randonnées Galice, de la editorial Rother (sí, soy un poco friki y tengo guías en francés).
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- Distance Instructions
Datos técnicos
- Longitud: 14,6 km
- Fecha de realización: 16/03/2019
- Desnivel de subida: 866 m
- Desnivel de bajada: 866 m
- Punto más alto: 1.842 m
- Punto más bajo: 1.104 m
- Tipo de recorrido: Circular
- MIDE / Severidad del medio natural: 3
- MIDE / Orientación en el itinerario: 2
- MIDE / Dificultad en el desplazamiento: 2
- MIDE / Cantidad de esfuerzo necesario: 3
Mapa
Información geográfica propiedad del Instituto Geográfico Nacional.
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