Cuando hacemos un viaje de varios días, además de preparar las rutas que más ganas tenemos de hacer, solemos llevar un par de ellas en la recámara por si el tiempo no acompaña demasiado. Es lo que nos ha ocurrido hoy. Hay nubes bajas que tapan toda la zona de cumbres. Optamos por una ruta de bosque y así, si nos pilla la niebla, seguro que le da un aspecto mágico.

Como la ruta es corta no nos damos prisa en empezar y visitamos antes el precioso pueblo de Bossòst. Tras pasearlo un rato y tomarnos el segundo desayuno del día nos vamos, ahora sí, hasta Bausen, donde comienza la ruta que queremos hacer.

Bausen es un pueblo muy chiquitito al que se llega a través de una carretera con unas curvas que se las traen. Hay muy poco sitio para aparcar, así que tuvimos que hacerlo en el arcén, algo antes de llegar a las primeras casas. Vamos en furgoneta e intuimos que dar la vuelta después para bajar va a tener cierto intríngulis, pero ya nos preocuparemos por eso a la vuelta.

Comenzamos atravesando el pueblo para abandonarlo por las últimas casas que se encuentran al noroeste. La primera parte de la ruta, siempre cuesta arriba, es algo sosa, sin demasiada vegetación ni vistas a lo lejos por culpa de las nubes. La cosa cambia drásticamente al alcanzar el collado Coret de Pan.

Poco a poco la vegetación se va volviendo más frondosa hasta que nos vemos plenamente adentrados en el bosque. Aquí el camino es casi llano, aunque estamos recorriendo la inclinada ladera del barranco del Riu des Lavadors. Esta zona de bosque destaca por las hayas y avellanos.

Nosotros estamos haciendo la ruta en el sentido que viene en nuestra guía, pero nos damos cuenta de que casi todo el mundo que nos encontramos la hace al revés. Vamos cruzándonos  con gente continuamente y a veces cuesta hacer fotos sin otras personas.

Tras cruzar el río subimos un pequeño repecho y a continuación emprendemos la bajada. Esta vez las hayas se entremezclan con robles. En algunos puntos la pendiente de la bajada es fuerte, pero no importa nada bajarla despacio. Solo apetece empaparse de la belleza de este bosque.

Es cierto que de vez en cuando los numerosos grupos de gente que nos cruzamos no nos dejan disfrutar plenamente de la paz del lugar, pero qué le vamos a hacer. Estamos en un lugar turístico sin haber venido temprano, sabíamos que podía ser así.

Volvemos a cruzar el Riu des Lavadors y seguimos bajando de forma cómoda. De repente el bosque se aclara y recordamos que estamos rodeados de nubes. Desde este punto debería verse hasta el Aneto, pero nosotros debemos conformarnos con el valle. Decidimos parar a comer sentados en el muro de una de las primeras casas que nos encontramos al llegar de nuevo a Bausen. Ya con la barriga llena, volvemos a la furgoneta. Damos por concluida esta estancia pirenaica.

La verdad es que la ruta es preciosa y, a pesar de que todo el mundo la hace del revés, a nosotros nos gustó hacerla así para hacer primero la parte menos bonita y que después ya fuese todo disfrutar.

Más información sobre esta ruta

Descubrimos esta ruta en la Guía Excursionista Val d’Aran, de Sua Edizioak.

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04/08/2020 17:45
  • Distance Instructions
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Datos técnicos

  • Longitud: 6,5 km
  • Fecha de realización: 19/08/2017
  • Desnivel de subida: 369 m
  • Desnivel de bajada: 369 m
  • Punto más alto: 1.232 m
  • Punto más bajo: 893 m
  • Tipo de recorrido: Circular
  • MIDE / Severidad del medio natural: 2
  • MIDE / Orientación en el itinerario: 3
  • MIDE / Dificultad en el desplazamiento: 2
  • MIDE / Cantidad de esfuerzo necesario: 2
→ ¿Qué es el MIDE?

Mapa

bosque_de_carlac

Información geográfica propiedad del Instituto Geográfico Nacional.