Nosotros viajamos a Chamonix-Mont-Blanc a finales de un mes de agosto y estos consejos están basados en nuestra experiencia. En invierno y en otras temporadas con menos afluencia puede haber cambios sustanciales. Alguno de estos puntos los llevábamos estudiados desde casa, pero otros los fuimos descubriendo allí sobre la marcha y son cuestiones que nos habría gustado saber de antemano.
1. Dónde dormir en Chamonix
A lo largo de todo el valle de Chamonix hay numerosos campings, pero nosotros no los utilizamos. Siempre encontramos aparcamientos en los que dormir. Es cierto que muchos aparcamientos son de pago y limitados a vehículos de menos de 2 metros de altura, pero hay más opciones. Si te sales del núcleo de Chamonix, en el resto de poblaciones del valle no hay problema para aparcar.
Fuera de Chamonix nosotros dormimos en Le Tour, Argentière, el aparcamiento del telesilla del Glaciar des Bossons y junto al Lac des Chavants.
En Chamonix dormimos en un inmenso aparcamiento de tierra junto a la instalación del luge, algo inclinado, pero llano hacia el fondo. Hay un cartel que pone que las autocaravanas no están permitidas, pero no tuvimos problema. El aparcamiento es tan grande que nunca lo vimos lleno, así que mientras las autocaravanas no lo copen, supongo que harán la vista gorda. El Lac des Gaillands también es una zona tranquila por la noche y aunque el aparcamiento tiene límite de altura, en la carretera se pasa la noche perfectamente ya que no hay tráfico.
2. Dónde aparcar en Chamonix
El pueblo de Chamonix es sumamente turístico y está siempre a reventar. Aparcar una furgoneta o autocaravana es una tarea realmente complicada. Si no te da pereza caminar un poco y no quieres volverte loco dando vueltas, lo mejor es ir directamente hacia el final del pueblo, pasando la zona deportiva. Verás un montón de vehículos aparcados en los arcenes.
3. Rutas de senderismo en Chamonix
Si piensas viajar hasta aquí en verano, supongo que será para hacer alguna ruta de senderismo. Pues estás en el lugar ideal. Sin ninguna duda, vete a la Maison de la Montagne, en el centro de Chamonix, para pedir información sobre esto. A lo mejor has decidido ya las rutas desde casa, pero vete allí igualmente para comentar las que pretendes hacer. A veces cierran algún remonte mecánico o sendero por mantenimiento y te interesa saberlo. Además de hablar con los guías y preguntarles tus dudas, podrás consultar mapas y libros de rutas por la zona. En la Maison de la Montagne no venden las guías, pero si te gusta alguna, puedes comprarla en la librería del pueblo. En español tienen pocas y no muy buenas. Si sabes francés, yo me decantaría claramente por una en este idioma. También las hay en inglés.
Todo el valle está muy bien señalizado. Prácticamente en cada cruce hay un poste alto con flechas. Eso sí, tienes que tener claro tu destino porque las posibilidades son casi infinitas, así que llevar un mapa también es imprescindible.
Aunque hay rutas que salen desde el mismo valle, en general los paisajes más espectaculares los disfrutarás en las zonas altas, por lo que te recomiendo que, si puedes permitírtelo, no escatimes en remontes mecánicos.
Estas son las rutas que hicimos nosotros.
4. Multipass Mont-Blanc
Como casi todo en Chamonix, los remontes mecánicos no son baratos. Si vas a coger varios remontes mecánicos, y especialmente si uno de ellos es el de l’Aiguille du Midi, probablemente te interese esta opción. Es una tarjeta que te permite utilizar todos los remontes que quieras por cada día de uso que la cojas. Hay infinidad de combinaciones (para días consecutivos, no consecutivos, familias…). Al principio puede parecer lioso, pero vale la pena dedicar un tiempo a pensar qué remontes prevés utilizar y hacer cuentas. Te ahorrarás un buen dinero. Esta tarjeta tiene otra ventaja que te cuento en el siguiente punto.
5. Transporte público en Chamonix
Los trenes y autobuses en Chamonix funcionan a la perfección y con una frecuencia bastante elevada. En caso de alojarte en cualquier establecimiento del valle (camping, por ejemplo) o de tener la Multipass Mont-Blanc, puedes utilizarlo de forma gratuita. Es una opción fantástica para hacer rutas de senderismo lineales ya que podrás volver a tu furgo en bus o tren. También viene genial para no buscar aparcamiento en Chamonix y aparcar en cualquier otro sitio y desplazarte hasta allí en transporte público.
6. Meteorología
Como en todas las zonas de montaña, la meteorología puede ser bastante cambiante. El valle de Chamonix está formado por el macizo del Mont Blanc a un lado y el de las Aiguilles Rouges, de mucha menos altitud, al otro. Las condiciones meteorológicas pueden llegar a ser bastante distintas en uno u otro o dependiendo de la altitud. En todas las oficinas de turismo y en la Maison de la Montagne tienen colgada la previsión meteorológica en la entrada. En esta web puedes consultar la previsión de una forma muy visual. En verano, aunque de día puede llegar a hacer calor, en cuanto se pone el sol hay que abrigarse. También son frecuentes las tormentas por la tarde, por lo que es importante madrugar.
7. Recarga de agua y vaciado de aguas grises y negras
En Chamonix solo hay un área para autocaravanas junto al Carrefour. Ahí pueden vaciarse las aguas negras y grises y hay una fuente. De todas formas, nuestra manguera no era compatible con ese grifo, así que descubrimos esta otra fuente que sí nos sirvió. También hay otra área de autocaravanas en Argentière.
8. Comida
Chamonix es una zona bastante cara (al menos para nuestra economía), así que nosotros optamos por llevar casi toda la comida no perecedera desde España y comprar allí solo los productos frescos. De todas formas, hay numerosos supermercados y tiendas donde abastecerse.
9. Material
Chamonix está lleno de tiendas de ropa de montaña. Si te gusta, puedes volverte realmente loco. Puede encontrarse de todo. En cualquier caso, si necesitas algo de forma puntual para una actividad que quieras hacer allí y no te interesa comprarlo, también puede alquilarse de todo. Yo alquilé unas botas para hacer alpinismo, por ejemplo.
10. Repostar
La gasolina y el gasóleo en Francia son bastante más caros que en España, aunque hay grandes diferencias entre unas gasolineras y otras. Las más baratas suelen ser las de los supermercados y las más caras, las de las áreas de descanso de las autopistas.
11. Viaje en autopista hasta Chamonix
Independientemente de la zona de España desde la que viajes, lo más probable es que utilices alguna autopista francesa, cuyos peajes son bastante caros. Ten cuidado, porque no todas las tarjetas de crédito funcionan en los peajes (por ejemplo, la de mi banco), así que infórmate antes de viajar o lleva suficiente dinero en efectivo.
Por lo que hemos leído y nos ha contado alguna persona de primera mano, no es nada recomendable dormir en las áreas de descanso de las autopistas, por muy bucólicas que nos resulten. Son frecuentes los robos por lo fácil que resulta después escapar de allí. Nosotros, por si acaso, siempre nos buscamos pueblecillos en los que dormir.